Crítica de “Host”, de Rob Savage: Terror en la era del Coronavirus y Zoom (Netflix)

¿La película definitiva de los tiempos del COVID-19? Esta producción lanzada originalmente por la plataforma Shudder desembarcó en febrero de 2021 en Netflix.

Host (Reino Unido/2020). Dirección: Rob Savage. Elenco: Haley Bishop, Jemma Moore, Emma Louise Webb, Radina Drandova, Caroline Ward y Alan Emrys. Guion: Gemma Hurley, Rob Savage y Jed Shepherd. Edición: Brenna Rangott. Duración: 56 minutos. Disponible en Netflix.

Estrenado el 30 de julio en Shudder, una pequeña plataforma de streaming especializada en cine de terror, este mediometraje (57 minutos) de Rob Savage es probablemente de los títulos que mejor sintonizaron con esta era de confinamiento hogareño, boom de Zoom (en verso) y angustias íntimas. Lo hace con una historia que -más allá de apelar en su segunda mitad a recursos ya vistos en diversos films del género (las sagas de Actividad paranormal, El proyecto Blair Witch o REC)- demuestra un uso muy creativo de sus mínimos recursos y aprovecha sus limitaciones para construir un relato ingenioso, inquietante y, sí, bastante aterrador.

La premisa es sencilla (cinco amigas y un varón contratan a una medium para una sesión de espiritismo vía Zoom), pero entre conexiones que no siempre funcionan a la perfección, generosas dosis de alcohol, bromas que se salen de cauce y errores involuntarios pero determinantes a la hora de lidiar con espíritus las cosas derivan hacia lo sobrenatural, lo fantasmagórico y... lo sangriento.

El inglés Rob Savage (Strings) maximiza los elementos a su disposición (pantalla partida, filtros de Zoom, celulares y computadoras que funcionan como cámaras subjetivas) y solo sobre el final apela a algunos golpes de efectos propios del cine de terror convencional que -de todas formas- funcionan de manera más que aceptable. El “humor de pandemia” es muy simpático (los dos únicos personajes que se encuentran en determinado momento se saludan con un codazo pese a que sus vidas corren serio riesgo en ese preciso instante) y la duración inferior a una hora hace que la narración no se estire más allá de lo necesario.

Ni obra maestra, ni cine revolucionario, Host es una de esas cartas de presentación de un cineasta y un grupo de colaboradores que capturan con convicción y sensibilidad la esencia de un momento histórico (la pandemia del COVID-19) y lo transforman en un eficaz y atrapante ejercicio de género. Una demostración más de que no hacen falta grandes presupuestos ni demasiados recursos cuando una idea original es buena.




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