Críticas
Moonrise Kingdom: Un reino bajo la Luna, de Wes Anderson
Sinfonía para adolescentes
El director regresa a los mejores momentos de su carrera (Tres son multitud, Los excéntricos Tenenbaum) con una historia de amor a los 12 años que propone -como siempre- una puesta en escena magistral, pero que esta vez le agrega una vitalidad, una sensibilidad y una emoción poco habituales hasta ahora en su cine.
Moonrise Kingdom: Un reino bajo la Luna (Estados Unidos/2012). Dirección: Wes Anderson. Guión: Wes Anderson y Roman Coppola. Con Jared Kilman, Kara Hayward, Bruce Willis, Edward Norton, Bill Murray, Frances McDormand, Bob Balaban, Tilda Swinton, Jason Schwartzman y Harvey Keitel. Fotografía: Robert D. Yeoman. Música: Alexandre Desplat. Edición: Andrew Weisblaum. Diseño de producción: Adam Stockhausen. Distribuidora: UIP/Sony. Duración: 94 minutos. Salas: 14.
Las películas de Wes Anderson se han vuelto un universo cerrado en sí mismo. Estructuradas cada vez más como casas de muñecas o cuentos troquelados, se han alejado tanto en lo formal de cualquier tipo de realismo que ya ni siquiera tiene sentido usar la realidad como referencia estética. Son estructuras autosuficientes, con una lógica interna propia y una serie de gestos formales claramente distinguibles. En ellas, nada parece estar librado al azar o a la suerte. Cada centímetro de la puesta en escena está pensado, medido y calculado como si se tratara de una composición musical para orquesta.
No es casual, en ese contexto, que Moonrise Kingdom: Un reino bajo la Luna empiece con una pieza musical de Benjamin Britten titulada The Young Person's Guide to Orchestra que, interpretada por Leonard Bernstein y la Filarmónica de Nueva York, consiste en ir armando y explicando, parte a parte, el sonido de una orquesta completa. El cine de Wes Anderson puede ser comparado con este acercamiento: son películas "compuestas" con precisión a partir de una serie de elementos que, sumados entre sí, generan un sonido complejo y completo. Es cierto que todas las películas se construyen de manera similar, sólo que en el caso de Anderson esta construcción tiene marcas que son muy precisas y evidentes. No parece haber lugar para la improvisación. Son películas como partituras, en las que se ha estipulado y controlado hasta el más mínimo detalle.
Ese "sistema" no siempre genera los mismos resultados. Y allí es donde entran a jugar los intangibles que hacen que el cine, finalmente, no sea jamás una ciencia exacta. Uno podría decir que -dentro del cine de Anderson- hay guiones mejores que otros, elencos mejores que otros, universos más interesantes que otros, y no se equivocará. Pero tengo la impresión de que no está allí el secreto de Moonrise Kingdom, la película más exitosa de la carrera del director de Los excéntricos Tenenbaum, sino en esa zona casi incontrolable para cualquier director que es la respiración, el aire, la emoción que puede aparecer o no en un film. La estructura de Moonrise Kingdom probablemente sea igual de firme que la de La vida acuática, pero si aquella película parecía un diorama de museo, rígido y formal, esta parece viva, latente.
Anderson recupera en esta historia de amor y aventuras entre dos chicos de 12 años, Sam y Suzy, el aliento vital y emocional que caracterizaron a películas como Tres son multitud y Los excéntricos Tenenbaum. Acaso tenga que ver con la edad de los protagonistas, a quienes uno puede suponer más directamente conectados a este universo exagerado y de ensueño. Hay algo infantil en el cine de Wes Anderson y uno tiene la sensación de que cuando los protagonistas son niños o adolescentes la "sinfonía" se completa más naturalmente. De hecho, hasta se podría decir que el estilo conecta más con los recuerdos embellecidos que un adulto tiene de sus doce años que con la sensación que se tiene en el momento.
Moonrise Kingdom transcurre en 1965 y eso le da a la película un aura algo nostálgica, que conecta a los espectadores con la idea de la infancia como recuerdo (no hace falta haber tenido 12 años en ese momento, la infancia siempre fue... antes) y con las sensaciones del primer amor, por más platónico que pudiera ser.
Aquí son dos chicos "conflictivos" los que se conectan, primero a través de cartas, y luego en los hechos. Suzy tiene algo del personaje de Gwyneth Paltrow en Los excéntricos Tenenbaum: es la solitaria hija (tiene tres hermanos varones, más chicos) de un matrimonio de apáticos y ensimismados abogados (Frances McDormand y Bill Murray) con los que mantiene una fría y distante relación, a lo que hay que sumarle unos raptos de inusitada violencia que la chica tiene.
Sam es un chico huérfano que está pasando un verano como boy scout en la isla donde vive Suzy. Odiado por sus compañeros e igualmente solitario, Sam se topa con Suzy en una obra infantil, queda flechado y esa conexión se extenderá a una serie de cartas enviadas de una punta a otra de la isla. De allí a planear un encuentro y fuga hay un sólo paso.
El film se centra en ese intento de fuga y en la búsqueda que de ellos hacen los padres de Suzy, los boy scouts (comandados por Edward Norton) y el también solitario y tristón policía de la isla, que encarna Bruce Willis, mientras una fuerte tormenta se avecina. Es en la relación entre los dos chicos donde Moonrise Kingdom encuentra ese aire vital, esa "respiración" a la que hacía referencia antes. La extrañeza de conocerse, de descubrirse, del primer beso y de enamorarse entre estos dos chicos que aún no saben bien qué es lo que les sucede no sólo es el atractivo principal del film sino su corazón, el lugar donde uno entra emocionalmente en este juego de sombras chinescas.
Los actores adultos quedan por detrás, aportando si se quiere algún toque de humor -en el caso de Tilda Swinton que encarna al personaje/función "Social Services"- y, en el de Willis, el link emocional que une a grandes y chicos (dato curioso, observen las situaciones con niños que los personajes de Willis aquí y en Looper tienen que atravesar). El resto de los habituales elementos que componen el universo "andersoniano" están todos en el acostumbrado nivel de excelencia (música, arte, vestuario, fotografía, etc.), pero por ahí no pasa la cuestión principal. Aún la más desabrida y árida película suya es inmaculada en todos esos rubros...
Entre todas las metáforas posibles que se suelen usar para describir el cine de Anderson -además de la evidente que, en este caso, tiene que ver con lo orquestal-, aquí se me hizo muy obvia una idea de puesta en escena teatral, como si toda la película fuera una de esas obras escolares ambiciosas que hacía el protagonista de Tres son multitud. Por más cuidado, esmero y atención al detalle que se ponga en la preparación de una obra escolar, siempre habrá a la hora de hacerla un chico que dude, una chica que tenga miedo, uno que se equivoque u otro que no quiera salir a escena. Ese es el nervio y esa es la vibración que dan vida a esta extraordinaria película. Ese es el nervio y esa es la vibración que hacen tan encantadora como inmanejable una historia de amor como la que acá se cuenta.
Trailer del film:
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<p>Muy buena crítica. Sólo un detalle: \"Rushmore\" se estrenó entre nosotros (aunque suene insólito) no como \"Tres son multitud\" sino \"Tres es multitud\".</p> <p>Coni: me parece que vos pensás que todo el cine debe ser de la misma forma. Cassavettes y W.Anderson son muy diferentes pero eso no significa que uno sea mejor que otro, o que si nos gusta uno debamos rechazar al otro.</p>
<p>Hay veces que lo amo a Wes Anderson por las puestas que hace. Es una bestia de la dirección de arte, los encuadres, la mise en scene. En ese sentido nadie lo iguala.</p> <p>Esta peli me gustó mucho, me pareció la mejor de él luego de Rushmore y Tenenbaums.</p> <p>Sin embargo, me pregunto cuanto más puede explotar el mismo modelo. Sus obras son pura belleza cool, y no se si eso es suficiente para dejar algo en el espectador además de cuadros bonitos.</p> <p>¿A Cassavettes le gustaría Wes Anderson? Yo creo que no...</p>
<p>Recién la ví esta tarde, así que no creo que mi comentario tenga difusión alguna, pero lo cierto es que salí algo defraudado, cosa que me sucede cuando la expectativa previa es grande. Cine para adolescentes y niños creciditos, no me enganchó para nada, lo cual no implica en absoluto cuestionar las loas precedentes. Justo para quedar bien con los nietos de mi vecina.</p>
<p>lástima que sale todo mal escrito y formateado y sin signos de puntuación.</p>
<p>\"we want our film to be beautiful not realistic.\" (of montreal)</p> <p>Mariana, creo que Wes Anderson no es para vos ni para los otros que vapulean Moonrise Kingdom. de la misma manera en la que yo no volvería a ver una película de Miranda July, porque ya aprendí la lección de que su cine me resulta pretencioso y desalmado, quien va a ver una obra de W. A. sabe que, como bien dice Diego, él siempre se encuadra dentro del estilismo de película \"maqueta\"para contar una historia, que los personajes suelen ser excéntricos hasta el punto de resultar poco creíbles, que los diálogos son un poco \"smartass\" y minimalistas. a pesar de todo esto sus películas funcionan (algunas más que otras), y es cierto que en ocasiones, sobre todo en Moonrise Kingdom, hay muchos resquicios donde encontrar emoción. me extraña que alguien no pueda conmoverse siquiera con la escena donde los dos bailan y se besan en la playa mientras suena Les Temps de l\'amour. pero en fin, son gustos y gustos.</p> <p>Otra cosa, \"el grupo de boy scouts -universo poco explotado por la comedia indie o mainstream\" es una broma porque películas del género hay para ver hasta el hartazgo.</p>
<p>Wes Anderson es de los pocos directores norteamericanos que tienen un universo propio, y en \"Moonrise ...\" lo vuelve a demostrar (al igual que en \"Los excentricos Tenembaum\" y \"Rushmore\") - En esta fabula tan disfrutable combina a la perfeccion esas escenas tan planificadas visualmente con instantes de un gran lirismo y emotividad - Como siempre en el cine de W.A. descuella la banda sonora (es un verdadero deleite escuchar las variaciones de Benjamin Britten) - La parejita protagonica esta fantastica, y en el perfecto elenco de adultos sobresalen Tilda Swinton como una villana desopilante, un tierno Bruce Willis y la gran Frances McDormand.</p>
<p>Ya la vi 2 veces en el cine, desde el jueves. No va a haber una mejor en mucho tiempo.</p> <p>También, va a hacer estragos en los directores de arte. Que no entienden que lo maravilloso de WA no pasa (sólo) x ahí.</p> <p>La segunda vez fui con siete amigosas, hacía mucho que no iba al cine con tantas ganas de compartirlo.</p> <p>Buena peli para pincharle el globo a los pinchaglobos.</p>
<p>Cito una crítica con la cual me identifico: Uno sale (del cine) diciendo “qué linda película”, aunque no, quizás “qué buena película”. La película sobrevalorada del año.</p>
<p>Me pareció una película adorable. El amor y la lealtad con la mirada inocente y sincera de los niños. Me gustó mucho verla.</p>
<p>La cita, en realidad --calculo que traducida al inglés del original en portugués--, es de Miguel Gomes, el director de TABU, que es también el fan número 1 de Wes Anderson. Pero Miguel no hablaba de Anderson en esa cita, hablaba de su cine, del cine en general...</p>
<p>Ah, qué boba, Diego, ¿es de Anderson la cita, no? Se me ocurrió al pie de la escalera. Me quedé dandole vueltas al coco, al final, porque primero quise distanciarme de la irritación inicial que me provocó la peli del romance entre PJ Harvey en miniatura y el niño -viejo, para hablar en frío, y ahora ni rastros de ese paspe. Sigo quedandome con Toy Story 3 si pienso en una peli de evocación de la infancia del último tiempo, pero como crítica de cine, ya ves, soy voluble como las masas populares.</p> <p>gracias por el intercambio</p>
<p>Obra maestra que combina Melody y La piel dura. Bellísimo fresco de los ritos iniciales de la adolescencia. Wes Anderson es un director brillante.</p>
<p>Mariana, si la película fuera \"robótica\" sería imposible que ese amor adolescente fluyera como lo hace y fuera tan creíble. Son las escenas de amor adolescente o infantil más logradas de los últimos tiempos.</p>
<p>La peli es como una maqueta del Ibertren. Todo muy lindo, la vaquita y el arbolito puestos en el lugar correcto. Y como siempre pasa en estos casos, con un juguete tan perfecto, el nene se queda sin jugar.</p>
<p>Un agregado, para Mariana: \"The beauty of cinema is that it allows us to go back in time, to our childhood maybe, and believe in unbelievable things. All of this is a construction so it’s artificial, it’s not reality, it’s not the same world we are living in, it is cinema. But I guess that cinema can generate an inner truth, and there is a truth that exists in artificial structures that you can relate and react to in an emotional way,\"</p>
<p>No estoy de acuerdo, Mariana, pero entiendo tu opinión y sé que a muchos le sucede lo mismo con el cine de Wes Anderson. Si te bancás, o te gusta, verlo a partir de ese excesivo formalismo de la puesta en escena, si no te incomoda ese estilo distante y, como vos decís, \"robótico\", lo lográs disfrutar mucho en algunas películas, en las mejores (en las otras se siente lo que vos decis).</p> <p>Creo que lo que hay que hacer con el cine de Wes es alejarse de toda idea de naturalismo al analizarlo, casi como si estuvieras viendo una película de Bresson.</p> <p>A mí me gusta encontrar las emociones en esos resquicios, son como zonas liberadas y cuando salen a la luz, explotan. No creo que WA lo haga por \"posmoderno\". Es su estilo, y punto. A esta altura, por lo repetitivo que puede llegar a ser, si fuera calculador lo cambiaría, pero creo que no puede, que no le sale, que su talento (o no) está ahí, necesita ese tipo de estructura yo se siente cómodo trabajando en esa zona.rnrnPero gustos son gustos, etc, etc, etc.</p>
<p>¿cuando ponen la critica de actividad paranormal 4?</p>
<p>No coincido nada con unos de mis críticos locales favoritos, esta vez. Me parece otro ejemplo de cine maqueta, otro ejercicio de formalismo puro en el que las decisiones estilosas están por encima de las ideas narrativas, oprimiéndolas y anquilosando todo en una serie de viñetas, fotografías y paneos siempre bellos y vistosos pero absolutamente epidérmicos y olvidables como cine. Todo parece originarse en qué lindo quedaría un tipo de jogging colorado contra esa mesa ratona o por qué no ponemos a los dos kidults disfrazados en un marco de acantilado rocoso. Es absolutamente lógico que la respiración, o cualquier tipo de emoción brillen por su ausencia, es casi imposible que de un planteo tan ultracalculado para la puesta fluya algún tipo de cuestión emotiva o siquiera empática, con un núcleo de dos chicos antipáticos que discursean robóticamente unos diálogos soporíferos, vacuos como el conjunto. Hasta el humor es mezquino, Frances McDormand corriendo en camisón y gritando por altavoz a sus pimpollos. Quizá es en el grupo de boy scouts -universo poco explotado por la comedia indie o mainstream- donde sí respira un poco la cosa y la gracia se deja aparecer.</p> <p>Hay un regodeo en el miren qué ingenioso y posmoderno soy en las películas de Anderson (incluso en Rushmore, la mejor), un juego solitario. La maqueta, la casa de muñecos a los que se reducen los personajes, como el juguetea para un director que, muy preocupado por mostrar estilo de autor, debe pasarselo bomba, se ve, pero deja poco para los que estamos afuera. Como esos músicos que hacen largos solos con sus instrumentos mientras los demas nos torramos en las butacas o hacemos la lista mental de la compra del Coto.</p>
<p>Hermosa critica Diego - La iban a dar en \"Nucleo\", pero por cuestiones de fechas y feriados no se pudo exhibir - Por suerte se estrena el 18.</p>
<p>La pelicula cumple lo que promete: 100% Wes Anderson.</p>
<p>Como me dijo un amigo, esta película es \"un milagro\". El que no lo aprecie en una primera oportunidad, que le dé una segunda. La mejor película del año, un clásico del futuro.</p>
<p>Cierto, la primera fue Bottle rocket, que nunca ví dicho sea de paso, jaja. eran tiempos sin descargas de internet y acá nunca se estrenó, creo. saludos</p>
<p>Esperé mucho esta peli, los comentarios eran más que auspiciosos. Juan Francisco tiene algo de razón. A esta, Wes la hizo de taquito. Muy por debajo de Rushmore o de Los excéntricos. De todos modos, con lo malas que vienen las pelis últimamente, ésta sobresale. Pero Wes, te pongo las fichas para la próxima. Saludos</p>
<p>las dos primeras peliculas de wes anderson son bottle rocket y rushmore... Los excentricos tenembaums es la tercera...</p>
<p>Una crítica brillante para una película brillante.</p>
<p>Será que es para adolescentes la sinfonía y yo ya pasé esa etapa... porque me pareció puro surrealismo vacío, snob. Típica para que le lluevan grandes críticas y la gente salga del cine diciendo WTF! El problema de ciertos directores innovadores es que su \"gran idea\" no dá para hacer una filmografía. Me gustaron (mucho) las dos primeras pelis de este Anderson, Rushmore y los Tenembaums, pero de ahí en más.... que se yo. Aquí la cosa va bien mientras se centra en la historia de los chicos, pero cuando hay que darle espacio a todas las estrellitas se vuelve una pavada. Por suerte Tarantino no hizo 10 PULP FICTIONS, ni el otro Anderson 10 MAGNOLIAS. Cuando Wes Anderson salga de su zona de comodidad y se juegue un poquito me llaman...</p>