Críticas

Estrenos

Crítica de “Por gracia de Dios”, de François Ozon

Ganadora del Gran Premio del Jurado en el último Festival de Berlín, la más reciente película del prolífico director de Los amantes criminales, Gotas que caen sobre rocas calientes, Bajo la arena, 8 mujeres, La piscina, Tiempo de vivir, Angel, Ricky, Mujeres al poder, En la casa, Joven & BellaFrantz y El amante doble reconstruye uno de los casos de abusos infantiles que más conmovieron a la Iglesia y a la sociedad francesa en su conjunto.

Estreno 29/08/2019
Publicada el 28/08/2019

Por gracia de Dios (Grâce à Dieu, Francia-Bélgica/2018). Guion y dirección: François Ozon. Elenco: Melvil Poupaud, Denis Ménochet, Swann Arlaud, Éric Caravaca y Josiane Balasko. Fotografía: Manuel Dacosse. Música: Evgueni Galperine y Sacha Galperine. Edición: Laure Gardette. Distribuidora: IFA Cinema. Duración: 137 minutos. Apta para mayores de 13 años con reservas. Salas: 9 (Arte Multiplex, Belgrano Multiplex, Village Recoleta, Patio Bullrich, Showcase Norte, América de Santa Fe, Del Centro de Rosario, Paradiso de La Plata y Showcase Córdoba).



Está claro que Ozon no es un autor. Su extensa obra cinematográfica comprende algunas películas interesantes y personales y otros muchos productos de vocación estrictamente comercial. Así y todo hay algo en esa heterogeneidad, un desparpajo para explorar formatos y temas sin demasiadas ataduras o mandatos, que hace que suela encontrar casi siempre algún elemento que me intriga, me seduce o, al menos, me llama la atención.

Hecha la aclaración, cabe decir que Por gracia de Dios encuadra, sin dudas, en las películas pensadas más en la taquilla y el impacto que en algún tipo de búsqueda estética, temática o formal más personal. Ello no implica que el resultado sea o deba ser per se mejor en uno u otro caso. Pero lo cierto es que es evidente que esta película es más 8 mujeresPotiche (Mujeres al poder) o Una nueva amiga, que Ricky, El refugio o Gotas que caen sobre rocas calientes.

El tema de la película reviste actualidad, es uno de esos que claramente puede identificarse como uno “importante”. Basándose en “hechos reales”, Ozon se asoma al caso del cura Bernard Preynat, que en 2016 fue denunciado por haber abusado sexualmente de decenas de niños desde los años '70 en Francia. Fiel a su inclasificable esencia, el costado exploitation del asunto está muy presente, pero también su costado político. Como en The Rati Horror Show, de Enrique Piñeyro, la película ve la luz cuando el caso aún está abierto en los tribunales (N. de la R.: En julio último fue expulsado del estado clerical, máximo castigo de la Justicia eclesiástica); en tanto todavía siguen sin decidirse los cargos por complicidad o encubrimiento que se endilgan a los superiores del cura acusado de abusos, en particular la denuncia efectuada contra el cardenal Philippe Barbarin.



Así, Por gracia de Dios es una anomalía por donde se la mire: explota un tema importante pero presta más atención a cómo impactó en las vidas de las víctimas y sus familias el proceso de denuncia que los detalles escabrosos de las experiencias sufridas; se viste de film cuestionador pero en la deriva narrativa el interés está más puesto en las contradicciones e internas del grupo que se forma para llevar adelante las denuncias.

Desde el punto de vista político merece prestarse atención a la importancia de que una película como esta se corra del corset del “cine de arte y ensayo”, que se trasvista de drama familiar y que sea tan amplia al momento de aceptar distintas miradas. Es eso lo que hace más fuerte la evidencia del abuso de poder, de la obscena falta de empatía y respeto, del encubrimiento y complicidad que parecen apuntar más alto que al cardenal en cuestión.

Las referencias no son directas y muchas veces provienen más de algo que se escucha en la televisión o en la radio: el Vaticano estuvo todo el tiempo al tanto, el actual Papa incluído. Es fácil encontrar frases de ocasión para sobreactuar una indignación no necesariamente sincera; llevar adelante acciones concretas que abracen a las víctimas, repudien duramente lo sucedido y castiguen a los criminales, se ve que no tanto. El caso no está cerrado. Y no está mal que una película como esta ponga la lupa sobre él.

(Esta reseña fue publicada previamente en la cobertura de la Berlinale 2019)






Sumate a OtrosCines/Club + Todos los beneficios del mes


COMENTARIOS

  • 28/09/2019 17:37

    El comentario de la cobertura de la Berlinale denota la ignorancia de alguien que no tiene idea sobre el tema abuso sexual. La película se concentra en las difficultades de la denuncia debido a las barreras de la iglesia, y en las consecuencias del abuso sexual en la vida de las víctimas, y F. Ozon introduce el tema con muy buenos recursos visuales y fundamentadas referencias. Vale la pena verlo, un film que permanecerá actual por mucho tiempo: mientras la iglesia y el abuso continuen asociados.

  • 12/09/2019 18:13

    Muy buena. Francois Ozon es un buen director que lleva con interés su cuento.-

  • 31/08/2019 19:15

    LEJOS DE SEÑOR, CERCA DE LA INFAMIA Francois Ozon es un prolífico cineasta francés autor de una obra con algunos altibajos pero nunca carente de interés. En esta oportunidad, se ha presentado en la Argentina su último trabajo, Por la Gracia de Dios, reciente ganador del festival de Berlín 2019. El film es un drama que sigue a un grupo de hombres que se unen para dar a luz el código de silencio que durante años protegió a un sacerdote que abusó decenas de niños en un campamento de una escuela religiosa en Francia hace más de 30 años. Basado en los sucesos que dieron lugar a la condena del cardenal Philippe Barbarin, en Lyon, en 2018 por ocultar la conducta del padre Bernard Preynat, POR LA GRACIA DE DIOS narra los diversos esfuerzos realizados para dar a luz aquellos abusos, a la vez de ilustrar sobre los efectos de los traumas provocados en los sobrevivientes y sus respectivas familias en esta crónica sobre la resistencia, el poder de la movilización, la vergüenza y el miedo a dar a conocer los hechos ocurridos. Francois Ozon plantea el drama como una crónica dentro de un espíritu documentalista que recrea la rebelión de una de las víctimas que, dándose cuenta que con un pedido de perdón no basta para resarcir la vergüenza ocultada durante tantos años. En consecuencia, decide continuar la lucha buscando a sus viejos compañeros de colegio con los que había compartido códigos de silencio, uniéndose para desmantelar dichos código y dar a luz aquellas verdades inconfesables que habían ocurrido durante su niñez. No obstante la sinceridad y la nobleza del relato, el film cae en un alegato que termina resultando repetitivo, aunque esa repetición no hace más que enfatizar en los códigos de silencio que se ha impuesto la Santa iglesia Católica al respecto. Podría interpretarse como si los sacerdotes acusados estuvieran absolutamente fuera de la ley de los hombres y solo estuvieran condenados por su conciencia. Dado que estos sucesos han ocurrido hace más de 25 años, las acciones legales están prescriptas. En consecuencia, los esfuerzos por obtener una sentencia judicial favorable a las victimas y/o poder condenar al sacerdote acusado ya no existe debido a que el periodo legal para reclamar justicia ha terminado. Solo queda el pedido de perdón de manera religiosa, el cual puede o no ser aceptado por la víctima, pero esta última nunca lograra una condena penal por parte de su abusador. Cabe aclarar que en general, dado que los abusadores han continuado en su accionar, y dada la labor de estos grupos de damnificados, han continuado apareciendo casos similares que si han podido ser canalizados a través de justicia. No obstante ello, la Iglesia no denuncia los casos sino que son las propias víctimas las que lo hacen. Incluso, el título original de esta película es la traducción de la frase francesa "Grâce à Dieu".Esta una frase que expresa el ex arzobispo cardenal Barbarin en una entrevista: "Gracias a Dios, estos eventos están sujetos a prescripción", dando a entender como una expresión de alivio de que el perpetrador ya no pueda ser procesado. El film de Ozon es claro y contundente respecto a su denuncia. No obstante ello, el espíritu reiterativo de los casos, el estilo falsamente documentalista adoptado, la larga duración del film (137 minutos) atentan contra el hecho puramente cinematográfico a pesar de su clara e importante postura formulada.

  • 28/08/2019 22:03

    ATENCIÓN: LEER ESTE COMENTARIO DESPUÉS DE VER LA PELÍCULA Al muy buen año de cine francés con películas como LA GUERRA SILENCIOSA y UN AMOR IMPOSIBLE. ahora se suma esta nueva obra del talentosos Francois Ozon El tema, basado en hechos reales, es la denuncia contra un sacerdote de la diócesis de Lyon por decenas de casos de pedofilia, encarado a través de tres personajes bien diferenciados. Así aparece la historia de Alexandre (Mevil Poupaud), un gerente ultra católico que es quien inicia la denuncia al enterarse que el sacerdote que abusó de él sigue en contacto con criaturas. La denuncia se potencia y amplía con la aparición del activista ateo Francois (Denis Ménochet) que cuenta con el apoyo de su esposa. Finalmente aparece un personaje oscuro que se llama Emmanuel (Swann Arlaud) que tiene secuelas físicas de los abusos y que cuenta con el apoyo de su madre quien logra sostenerlo y evitar que se suicide. Con una muy buena dirección de actores, Ozón logra momentos dramáticos muy intensos como los encuentros entre las víctimas y el sacerdote abusador cara a cara,las fuertes discusiones en el seno de las familias de los afectados, los debates entre los mismos afectados sobre los pasos a seguir,así como certeras observaciones sobre el rol de los medios y el laissez faire de la Iglesia Se le podrá reprochar algunos subrayados innecesarios como la repetición de flashbacks con el sacerdote invitando a los niños a lugares apartados o excesos en el recurso de la voz en off. Sin embargo, las debilidades señaladas están lejos de empañar el resultado final de esta gran película que ,merece un lugar en el decálogo de lo mejor del año. (8/10)

DEJÁ TU COMENTARIO


CRÍTICAS ANTERIORES


Crítica de “Misión: Imposible - Sentencia Final” (“Mission: Impossible - The Final Reckoning”), película de Christopher McQuarrie con Tom Cruise
Diego Batlle, desde Cannes

Tras su estreno mundial en el Festival de Cannes (Sección Oficial - Fuera de competencia), con la presencia de Tom Cruise y equipo, llega a los cines de todo el mundo (en la Argentina será el jueves 22 de mayo) la octava (¿y última?) entrega de una de las sagas de acción más populares de la historia.

LEER MÁS
Crítica de “La leyenda de Ochi” (“The Legend of Ochi”), película de Isaiah Saxon con Helena Zengel, Emily Watson y Willem Dafoe
Ezequiel Boetti

La compañía A24 incursiona en el género familiar con una fábula en la tradición del cine de Steven Spielberg.

LEER MÁS
Crítica de “C'est pa moi” ("It's Not Me"), mediometraje de Leos Carax (MUBI)
Diego Batlle

Tras su presentación en el Festival de Cannes 2024, llegó al servicio de streaming MUBI este notable y muy personal trabajo del director de culto francés.

LEER MÁS