Críticas
Estrenos
Crítica de “El cavernícola”, de Nick Park
Sin alcanzar las cimas de trabajos anteriores, la nueva propuesta de animación de Aardman es siempre bella y eficaz para el público infantil.
El cavernícola (Early Man, Reino Unido-Francia/2018). Dirección: Nick Park. Guión: Mark Burton, James Higginson y John O'Farrell. Con las voces originales de Tom Hiddleston, Eddie Redmayne, Maisie Williams, Timothy Spall, Richard Ayoade, Nick Park, Mark Williams, Miriam Margolyes y Rob Brydon. Fotografía: Charles Copping, Dave Alex Riddett, Paul Smith y Peter Sorg. Música: Harry Gregson-Williams y Tom Howe. Distribuidora: BF París. Duración: 89 minutos. Apta para todo público. Copias: 159.
Con seis largometrajes y decenas de cortos en su haber, el estudio británico Aardman (Pollitos en fuga, Wallace y Gromit: La batalla de los vegetales, Shaun, el cordero: La película) se ha convertido en uno de los grandes referentes de la animación stop-motion junto a Laika (ParaNorman, Coraline y la puerta secreta). El estilo que lo volvió famoso se mantiene inaltareble en El cavernícola: criaturas de plastilina, historias simples, directas, sin el gramaje emocional ni la imaginería visual grandilocuente de Pixar, pero con un humor infantil sumamente eficaz.
El cavernícola imagina los origenes del fútbol en una pequeña tribu de la Edad de Piedra. A ella pertenece Dug, un joven que aspira a dejar de vivir de la caza de conejos e intentar atrapar animales más grandes. Al lado de ellos hay un reino en la Edad de Bronce, más poderoso, que termina desplazándolos. La única forma para Dug y compañía de volver al terreno será un partido de fútbol contra el hiper profesional seleccionado local.
Dirigido por Nick Park, uno de los principales artistas y directivos de Aardman, el film no ofrece demasiadas matices ni subtextos. Tampoco guiños ni canchereadas destinadas a satisfacer a los más grandes. Lo de El cavernícola es hablarle directamente a los más chicos a través de un relato sencillo, con personajes queribles y un humor que de tan inocente a alguno podrá parecerle demodé.
Con el malvado Lord Nooth y la paloma mensajera que replica voz y gestos de la reina como responsables de los momentos más logrados, El cavernícola pierde algunos puntos cuando, sobre el final, utilice el fútbol para poner en boca de Dug algunas enseñanzas sobre el trabajo en equipo y la vida en comunidad. No era necesario explicar nada.
COMENTARIOS
DEJÁ TU COMENTARIO



CRÍTICAS ANTERIORES
-Clásico de clásicos de la historieta argentina (y mundial), la obra de Héctor G. Oesterheld y Francisco Solano López llegó casi siete décadas después al universo audiovisual con más hallazgos y logros que carencias. La primera temporada de solo 6 episodios deja mucho material para el análisis y con ganas de más.
-Acompaña a este texto un episodio de nuestro podcast Acerca de Nada en el que Batlle y Pablo Manzotti analizan esta transposición, y un informe sobre la producción.
El director de películas como Un amigo para Frank (2012) y Ciudades de papel (2015) y de decenas de episodios de series y de videoclips musicales tiene el desafío de dar el puntapié inicial a una nueva franquicia capaz de emular (y en un futuro suplir) a los Avengers.
En el marco de la 12ª Semana de Cine Portugués, se presentan en la Sala Lugones (Av. Corrientes 1530) con 7 funciones cada una la nueva película de Carneiro (tuvo su estreno mundial en la Quincena de Cineastas del Festival de Cannes 2024) y la ópera prima de Mateus (producida por Pedro Costa y estrenada en el último Festival de Locarno).
El director de Ciencias Naturales (2014), El Pampero (2017) y Las Rojas (2022) estrenó en la Competencia Internacional del Festival de Mar del Plata 2024 un film sobre las diferencias familiares y de clase que ahora llega al Gaumont y otras 27 salas (la mayoría Espacios INCAA).
Nunca pensé que esta película podía ser una de las malas vista por mi en los últimos años. Plata gastada apostada a algo nefasto.