Críticas
Streaming
Crítica de “A Vigilante”, de Sarah Daggar-Nickson, con Olivia Wilde (Netflix)
Tuvo su premiere mundial en el Festival SXSW 2018, pero recién ahora esta inquietante ópera prima de la australiana Daggar-Nickson llegó a la plataforma de la N roja.
A Vigilante (Estados Unidos/2018). Dirección y guion: Sarah Daggar-Nickson. Elenco: Olivia Wilde, Tonye Patano, Betsy Aidem, David Shumbris, Jim Ford, Cheryse Dyllan, Jack Caleb, Marian Zajac y Morgan Spector. Música: Danny Bensi y Saunder Jurriaans. Fotografía: Alan McIntyre Smith. Duración: 91 minutos. Disponible en Netflix.
Dos razones explican la llegada a Netflix de A Vigilante más de tres años después de su estreno en el Festival South by Southwest de 2018. La primera es incomprobable pero no descabellada: el parate de la industria durante el primer semestre de 2020 llevó a la plataforma –cuyo modelo de negocios se asienta en una caudalosa oferta– a “rascar la olla” buscando películas que difícilmente hubieran llamado la atención en condiciones normales.
La segunda, más visible, es la misma que justifica el estreno de, por ejemplo, Monstruo. Tiene que ver con un relato que aborda temáticas de indudable actualidad. Allí era la discriminación racional. En esta inquietante película protagonizada por una eléctrica Olivia Wilde, la violencia de género
La ópera prima de Sarah Daggar-Nickson es el reverso sobrio, seco y contenido de Hermosa venganza. En ambos casos hay una mujer con secuelas de la violencia masculina y una sed de venganza que pone al film en una ruta narrativa similar al de cualquier exponente del subgénero rape and revenge. Pero si la múltiple nominada al Oscar era un ejercicio pop y canchero, A Vigilante propone un durísimo e íntimo drama sobre un grupo de víctimas. Entre ellas está Sadie (Wilde).
La película la define en dos ámbitos. Uno, el “profesional”, la tiene en el rol del título, es decir, “ayudando” a distintas mujeres a sacarse de encima a sus parejas golpeadoras. El otro es la esfera íntima, donde entrena con una bolsa de boxeo, baila y llora a mares. A diferencia de los protagonistas masculinos de este tipo de películas, Sadie asoma como una criatura lastimada y vulnerable.
¿Qué le pasó? ¿Por qué actúa como actúa? A Vigilante entregará las respuestas yendo y viniendo en el tiempo para describir la conversión de Sadie en la mujer que es hoy. Hay, desde ya, un hecho traumático en su pasado como disparador. Un pasado no muy dispuesto a dejarla en paz, como demuestra una última parte que cae en los excesos y maniqueísmos que hasta ese momento la película había evitado.
Hacete soci@ de OtrosCines/Club
Con un aporte de solo 250 pesos por mes, accedé a la newsletter semanal con información, recomendaciones y análisis de tendencias solo para suscriptor@s, así como a otros beneficios exclusivos, y ayudás a sostener un proyecto periodístico independiente y de calidad.
Más información: OtrosCinesClub@gmail.com
Suscribirme
COMENTARIOS
-
SIN COMENTARIOS
DEJÁ TU COMENTARIO



CRÍTICAS ANTERIORES
-El 20 de junio último se cumplieron 50 años del estreno de Tiburón y esta producción de National Geographic dirigida por el francés Laurent Bouzereau reconstruye la concepción y el fenómeno de una película que en muchos sentidos cambió la historia del cine y la carrera del por entonces veinteañero Steven Spielberg.
-Disponible en la plataforma Disney+ desde el viernes 11 de julio.
Tras su estreno mundial en la Competencia Oficial de la Berlinale, y varias semanas antes de su llegada al servicio de streaming MUBI, se proyecta en 10 salas comerciales de Argentina la ópera prima de la reconocida dramaturga y guionista Rebecca Lenkiewicz.
Reseñas de tres novedades dirigidas por Matías Scarvaci, Constanza Niscovolos y José Celestino Campusano que coinciden esta semana en los cines locales junto a El mensaje, cuya crítica se publica en un texto independiente.
Cuarta entrega de la saga de Jurassic World y séptima de la franquicia, esta película de Gareth Edwards (Godzilla, Rogue One: Una historia de Star Wars, Resistencia) intenta conectar con el espíritu que Steven Spielberg creó en 1993, pero el resultado es bastante elemental y lleno de clichés.