Críticas

Cous cous: La gran cena, de Abdellatif Kechiche

Contra todos los prejuicios de este mundo (y de este crítico)

Este tercer largometraje del talentoso realizador de origen tunecino -conocido aquí por Juegos de amor esquivo- narra las desventuras sentimentales y gastronómicas de una familia de origen magrebí afincada en Francia. La película ganó cuatro galardones (película, dirección, guión y revelación femenina) en la entrega de los premios Cesar 2008, el Gran Premio del Jurado en el Festival de Venecia 2007 y el premio FIPRESCI de la crítica internacional al mejor film europeo de 2007.
Estreno 30/07/2009
Publicada el 30/11/-0001
Calificación: **** (Máximo: *****)

Cous cous, la gran cena (La graine et le mulet, Francia/2007). Guión y dirección: Abdellatif Kechiche. Con Habib Boufares, Hafsia Herzi, Farida Benkhetache, Abdelhamid Aktouche, Bouraouïa Marzouk y Alice Houri. Fotografía: Lubomir Bakchev. Edición: Ghalia Lacroix. Diseño de producción: Benoît Barouh. Distribuidora: Zeta Films, Duración: 151 minutos. Apta para mayores de 13 años. Copias en fílmico. Salas: 4 (Arteplex Centro, Arteplex Belgrano, Arteplex Caballito y Showcase Norte). Con apenas dos largometrajes previos -La faute à Voltaire (2000) y L'esquive (2003), estrenada aquí como Juegos de amor esquivo-, el realizador de origen tunecino Abdellatif Kechiche aparecía como uno de los más interesantes y sensibles observadores de la rica, compleja y contradictoria relación entre la Francia opulenta y los inmigrantes magrebíes. Esa ubicación (y capacidad) privilegiada queda ratificada en toda su dimensión en Cous cous, la gran cena (2007), una película que viene a demoler varios prejuicios de quien esto escribe y de muchos que ven al cine sobre minorías étnicas como un "mal necesario" engendrado por la dictadura de la corrección política.

¿Cuáles son los prejuicios y lugares comunes que Kechiche se encarga de voltear uno tras otro?

-Que toda historia sobre inmigrantes, sobre "héroes" anónimos de la clase trabajadora, debe ser narrada con un costumbrismo condescendiente, o con una mirada paternalista, o con una glorificación que prescinde de los matices, o con una seriedad digna de los temas "importantes". Por suerte, Cous cous, la gran cena nada tiene que ver con productos del tipo Mi gran casamiento griego, pero tampoco con el cine de los Loach, los Leigh, los Frears, los Dardenne o los Guédigian, por nombrar ejemplos bien distintos.

-Que toda película sobre gastronomía y bailes típicos debe caer en el pintoresquismo for export, en la exaltación del color local por sobre la intimidad y las reales preocupaciones de una minoría racial del Tercer Mundo en pleno Primer Mundo.. Por suerte, este tercer film de Kechiche, que tiene danzas típicias y comidas típicas y costumbres típicas, no cae en el típico error de vender "los grandes éxitos" para burgueses que se deleitan con un exotismo predigerido y servido en bandeja.

-Que si bien puede haber realizadores atentos e inteligentes, en definitiva sólo las directoras tienen la sensibilidad extrema y el know how para sumergirse en las profundidades emocionales de los personajes femeninos. No digo que no exista el cine de género, que no deba apoyarse y hasta exaltarse el cine de y sobre mujeres, pero la corta filmografía de Kechiche siempre ha tenido a ellas en los primeros planos y ha construido universos femeninos fascinantes.

-Que una película de 151 minutos es larga y probablemente aburrida, que un film sobre magrebíes no puede ser deliciosa y emotiva y genuina. Pues bien, señores/as: esta historia sobre una familia numerosa que intenta abrir y sostener un restaurante en el puerto como sueño y última esperanza de supervivencia dura 151 minutos y jamás abruma, es divertida y honesta y en muchos momentos también conmovedora. Es un film disfrutable y no por eso superficial, merecedor de todos los premios recibidos (mejor película, dirección, guión y revelación femenina en los Cesar 2008, Gran Premio del Jurado en el Festival de Venecia 2007 y el FIPRESCI de la crítica internacional al mejor largometraje europeo de 2007). Es, en definitiva, la confirmación de que Kechiche es un director con una sensibilidad especial para retratar su micromundo y, al mismo tiempo, para exponer sin pretensiones desmedidas ni bajadas de línea los grandes problemas de este mundo.

COMENTARIOS

  • 6/08/2009 0:11

    Frente a tanta coincidencia de los críticos a mano sobre la calidad de Cous Cous -inclusive el programa de mano del arteplex incluye un excelente comentario sobre la pelicula- resulta dificil explicar qué sensación me ha producido esta magnifica obra del cine -en mi opinión una de las mejores que he visto en los ultimos años. Se tiene que estar muy seguro de lo que se quiere trasmitir y mucho, muchisimo talento para lograr estos resultados. Es una celebración de la vida, de la mujer, de la sensualidad, de los afectos filiales parentales y del destino humano. Y además su director consigue hacernos amar a cada uno de los personajes -para colmo probablemente no actores-<br /> La obra contiene secuencias conmovedoras y momentos de sensualidad extrema. A riesgo de parecer ingenuo o impertinente me permito recomendar verla, especialmente a los que les gusta opinar sin ver las peliculas. Será un homenaje al cine y a ellos mismos.

  • 3/08/2009 18:46

    Para la segunda semana hemos logrado colocar una copia más en Cinemark Palermo y otra en La Plata!

  • 3/08/2009 17:54

    Coincido con Gordardista acerca de por qué hay tan pocas pantallas para ese cine llamado cine de arte como si eso fuera una distinción especial y se estrenan por semana tantas películas que no tienen sentido, y tantas otras mucho más interesantes quedan a la salvedad de conseguirlas en dvd legal o no legal. Sin embargo me parece muy loable que el complejo Arteplex se preocupe en traer un equipaje de buenas películas que nunca son suficientes por otra parte. La sed del cinéfilo no tiene saciedad. Lástima que hayan reciclado salas, que ya de por sí no resistían equipararse a la modernidad y se haya permitido la desaparición del Metro (que estaba adecuado con sus tres salas de las cuales podría haber salido una más) o el América tan abandonado al paisaje de la avenida Callao. Con respecto a la película, me pareció un bello poema acerca de las relaciones familiares con un toque de un humor minimalista que cobra una crueldad que convierte al pobre de Slimine en una especie de Monsieur Hulot tunecino humillado por los chiquillos que le hurtan lamoto y Hafsia Herzia uno de los rostros más hermosos aparecidos últimamente en el cine y agraciada con un trabajo actoral excepcional.

  • 2/08/2009 14:52

    ¿Por qué los cinéfilos no podemos disfrutar de una película así -que encima se trajo en fílmico- en salas como la gente? ¿Por qué tenemos que ir a los Arteplex (yo me resisto todo lo que puedo porque allí se escucha y se ve MAL) y no podemos verla en el V.Recoleta, Hoyts Abasto, C.Palermo, Patio Bullrich o buenas salas de Belgrano? ¿Por qué -segun explicó Diego- los exhibidores multisalas rechazan films premiados y de gran nivel artistico como éste para poner más y más productos mediocres? Y no me digan que no había salas, porque a Aliento -una pésima pelicula de Kim Ki Duk- le dieron las mejoras salas y no fue a verla ni el embajador coreano. CUÁNTA MIOPIA. DE CINE SABEN TANTO COMO YO DE INGENIERÍA CIVIL.

  • 1/08/2009 18:05

    Muy disfrutable. Muy emotiva. Muy humana. Realmente llega al corazón sin golpes bajos. Una lección de cine. De muy buen cine.<br /> Un placer que Bs.As. pueda disfrutar de una señora película sin nombres famosos, gracias a una distribuidora que "se juega". Felicitaciones.

  • 31/07/2009 19:59

    Vi Cous cous en mi vuelta al cine luego de estar alejada por el tema de la gripe.... cuanto extrañé!!!<br /> Muchos temas:la inserción de los habitantes de las ex colonias francesas, la falta de trabajo y la "conveniencia" de dar trabajo a otros inmigantes que resultan mas baratos a la industria, las relaciones familiares, alcanzar los sueños, las mujeres con esa manera nuestra de poner el cuerpo haciendo cous cous o bailando para ayudar a los que amamos. Disfruté cada minuto de los 151 sumergida en el mundo de Slimane Beiji y los suyos.

  • 30/07/2009 12:27

    "Que toda historia sobre inmigrantes, sobre "héroes" anónimos de la clase trabajadora, debe ser narrada con un costumbrismo condescendiente, o con una mirada paternalista, o con una glorificación que prescinde de los matices, o con una seriedad digna de los temas "importantes". Por suerte, Cous cous, la gran cena nada tiene que ver con productos del tipo Mi gran casamiento griego, pero tampoco con el cine de los Loach, los Leigh, los Frears, los Dardenne o los Guédigian, por nombrar ejemplos bien distintos".<br /> Batlle, es notable cómo borrás con la mano lo que escribís con el codo. Porque sostenés de entrada que la película de Abdellatif Kechiche volteó varios de tus prejuicios y en un solo párrafo te encargás de dejarlos más al desnudo y expuestos que nunca. Un horror.

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