Festivales
Sebastián Lelio consigue la gloria en otro hito del nuevo cine chileno
Con su cuarto largometraje, Gloria, el realizador de La sagrada familia, Navidad y El año del tigre regala una película sencilla, amable y encantadora a la vez sobre las desventuras tragicómicas de una mujer sesentona (gran trabajo de Paulina García). Uno de esos escasos films que consiguen el milagro de convencer a críticos, compradores y público. El resultado fue una de las mayores ovaciones que se recuerden en la historia de la Competencia Oficial del festival alemán.
Un periodista chileno que habitualmente asiste a la Berlinale me comentaba que este año no podría venir porque iba a cubrir los premios Oscar, pese a tener una película de su país en competencia aquí, algo que también es histórico. Ese sencillo dato sirve para darse una idea del gran momento que está viviendo el cine trasandino con varios éxitos internacionales sucesivos desde el estreno de No en Cannes el año pasado. Y, con Gloria, esa buena racha continúa.
El pequeño milagro de entregar una película que satisfaga a los diferentes tipos de espectadores que van a un festival (críticos, productores, público, programadores y varios etcéteras) se da muy pocas veces. Ese "milagro" lo logró hoy la cuarta película de Sebastián Lelio, que dejó conformes a todos y obtuvo la mayor ovación que recuerde en una función de prensa en mucho tiempo. La historia se centra en una mujer (obviamente llamada Gloria) de unos 60 años que no parece perder nunca las ganas de vivir. Sale a bailar a fiestas de gente de su edad, se ocupa de atender a sus hijos y tiene un espíritu vital que envidiaría la mayor parte de la gente de 25.
En uno de esos bailes conoce a un hombre mayor, recientemente separado, que la conquista con su afecto, carisma y comprensión. Pero la relación se complica ya que él tiene que lidiar con dos hijas y una ex esposa demandante, y con su imposibilidad de tomar ciertas distancias. Mientras lidia con su pareja, su molesto vecino y sus hijos, Gloria atraviesa distintos estados -y algunas crisis- que siempre parece llevar con enorme dignidad y resistencia.
Lo que Lelio logra en el film no es sencillo. Se trata de humanizar sin banalizar, de mostrar un concepto parecido a la "alegría de vivir" sin tornar el asunto en una tontería del tipo de las comedias picarescas inglesas sobre gente mayor a la manera de Chicas del calendario o similares. Hay algo notable en la película -al menos en gran parte de ella- que es la descripción de una persona a la que podríamos definir como normal y a la que el director nunca humilla ni se pone por arriba ni resulta jamás condescendiente (tiemblo imaginar qué haría alguien tipo Ulrich Seidl con una mujer así). Gloria llora con poemas malos, canta a voz en cuello temas melódicos hispanos tipo Camilo Sesto y puede ser de esas madres algo pesadas y pegajosas, pero jamás se la juzga, se la condena o se burla la película de ella. Al contrario, se pone siempre de su lado. Acaso, hasta demasiado.
Con un notable trabajo de Paulina García en el rol central y de Sergio Hernández como el digno aunque atribulado pretendiente, la película alterna situaciones dramáticas y cómicas, sin jamás recargar las tintas hacia uno u otro lado. Sabemos que el personaje vivirá situaciones dramáticas pero hay tanto cariño puesto en ella que resulta difícil imaginar que algo terrible pudiera pasarle (de hecho, es un gran logro del film no llevarla a esas zonas). Gloria es una película que casi pide a gritos una remake norteamericana. Entre las apuestas con colegas sobre quién debería hacer el personaje principal yo me la juego por Meryl Streep, aunque no creo que se anime a los desnudos de Paulina aquí.
No es Gloria una película perfecta. Tiene, para mí, algunos minutos de más (incluyendo varios cierres), algunas metáforas un poco obvias (una con un esqueleto bailable, otra con un pavo real) y sus intentos de combinar la situación personal de Gloria con la social que se vive en Chile, a través de una conversación en una cena o de las constantes marchas estudiantiles, son demasiado subrayadas. Es evidente que esa frescura y vitalidad que tiene Gloria es la que Lelio -y su guionista, y colega de la plataforma de OtrosCines.com, Gonzalo Maza (editor del blog Analízame)- ven como "revolucionaria" en Chile, la que está cambiando la cara del país hacia una más positiva, y es lógica esa comparación. Tal vez no sea del todo necesario repetirlo varias veces.
Entre las escenas notables del film hay una cena de la familia extendida de Gloria, una visita a un parque de diversiones (y sus consecuencias) y una excelente versión en vivo de Aguas de marzo, de Antonio Carlos Jobim, que tal vez no cumpla ninguna otra función narrativa que transmitir ese espiritu vital que tiene el personaje. En esa pequeña y aparentemente intrascendente escena de disfrute grupal está el corazón de esta sencilla, amable y encantadora película.
COMENTARIOS
DEJÁ TU COMENTARIO



FESTIVALES ANTERIORES
Nuestra enviada a San Sebastián armó este ranking con lo mejor que vio en el festival, una lista que incluye cuatro películas francesas (de ese origen es la de Richard Linklater), tres argentinas y tres españolas.
-El film de Alauda Ruiz de Azúa ganó la máxima distinción de la 73a. edición de la muestra vasca.
-El premio RTVE Otra Mirada (para películas con mirada de género) fue para Las corrientes, de Milagros Mumenthaler, y la mención, para Belén.
-Con tres largometrajes entre los 17 que forman parte de la Competencia Oficial, incluido el film de apertura 27 noches, el cine argentino tendrá un lugar de privilegio en la 73ª edición, que se realizará del 19 al 27 de septiembre.
-En este espacio se irán actualizando las reseñas publicadas en la cobertura de la muestra con sede en el País Vasco.
-Ya hay 49 críticas publicadas.
El director de Caja negra (2002), Monobloc (2005), Los santos sucios (2009), Verano maldito (2011), Dromómanos (2012), Lulú (2016) y El Ángel (2018) estrenó en San Sebastián un delirante y por momentos fascinante film de apenas 39 minutos que se hizo de forma paralela a El Jockey y que tiene varias conexiones con su más reciente largometraje.
<p>LUCIO.....nunca escuche esa definiciòn...pero si se te ocurriò a vos te felicito</p>
<p>Vi la película con Luciano y obviamente los comentarios que se hacen a la salida a veces se cruzan. No lei la nota de Pagina 12 pero el comentario de \"Aguas de marzo\" se le ocurrió a él, si a eso se refieren. Lo mío es un homenaje, je Ademas, coincidimos en la apreciación de la película...</p>
<p>MHG sos un zapato con caca pegada</p>
<p>MHG: Difícil que Lerer se haya copiado del texto de Página 12 por la sencilla razón que esta crónica fue publicada el domingo al mediodía y la de Monteagudo hoy lunes. A menos que se pasen las crónicas por Mail, cosa absurda para críticos de su nivel, probablemente -como suele ocurrir- los críticos comenten informalmente una película a la salida del cine. A mi me dio muchas ganas de verla tras su entusiasmo, espero venga al BAFICI.</p>
<p>Lerer se inspiró demasiado en la nota de Luciano Monteagudo en Pagina 12 o escriben en conjunto. No parece intelectualmente muy sincero.</p>
<p>Conmueve el entusiasmo de Lerer y su brillante descripciòn de Gloria..... pero lo de la remake norteamericana.... bueno esperemos un poco por lo menos. Desde que vi Tony Manero -despreciada por algunos- en un Bafici, siempre pense que Chile llegaria a hacer un cine realmente importante.</p>
<p>Me convenciste. Pasame el DVD que la veo. :D</p>